El ex policía Aníbal Luna, condenado por el crimen del fotógrafo José Luis Cabezas, recuperó la libertad al cumplir las dos terceras partes de la sentencia a 24 años que le impuso el Tribunal de Casación bonaerense, al revisar las duras penas dadas en el juicio oral a todos los acusados.

La familia de Cabezas se indignó al saber que se convirtió en el primero de los policías condenados por el crimen en salir de prisión, ya que los civiles responsabilizados del homicidio, conocidos como "los horneros", se encuentran en la calle desde el año pasado.

Aníbal Luna era un oficial ayudante de la comisaría de Pinamar que quedó acusado de haber seguido al fotógrafo de la revista Noticias los días anteriores al asesinato, con lo que colaboró con los secuestradores.

Había sido detenido el 5 mayo de 1997, el 4 de junio fue dejado en libertad y volvió a ser arrestado en Mar del Plata el 21 agosto de ese año.

Un tribunal oral lo sentenció a prisión perpetua, pero más tarde, al revisar el caso, el Tribunal de Casación Penal bonaerense bajó la condena impartida contra la mayoría de los imputados e impuso a Luna la pena de 24 años de cárcel.

Por aplicación de la ley 23.390 ("del dos por uno"), el tribunal de Dolores, a cargo de Susana Yaltone, Fernando Sotelo y Jorge Luis Dupuy, consideró que Luna "ha cumplido sobradamente con los dos tercios de la pena de 24 años de prisión a la que fue condenado". También valoró el cumplimiento de Luna de "los reglamentos penitenciarios teniendo calificación de ejemplar (10) y no registrando sanciones disciplinarias de ninguna índole".

Luna pagó una fianza de 40.000 pesos para dejar la cárcel de Dolores. Siguen detenidos los ex policías Sergio Camaratta, Gustavo Prellezo y el jefe de la custodia de Alfredo Yabrán, Gregorio Ríos, que espera que la Corte bonaerense revea su condena.