La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) urgió hoy públicamente a las más altas autoridades de Colombia a que aumente los esfuerzos para instrumentar medidas que detengan la violencia contra la prensa que en los últimos días ha dejado tres periodistas asesinados, al tiempo que manifestó su preocupación por la inseguridad que limita el ejercicio del periodismo debido a las agresiones de parte de los grupos involucrados en el conflicto interno.

El crimen más reciente contra un periodista ocurrió este viernes en la mañana. Tras culminar el noticiero matutino, José Ubiel Vásquez, director de la emisora La Voz de la Selva, en Florencia, en el departamento del Caquetá, al suroeste del país y donde existe fuerte presencia de la guerrilla y los paramilitares, fue asesinado por dos hombres a bordo de una moto que lo esperaron a la salida de la radio y le propinaron dos disparos. No había recibido amenazas.

Este caso está vinculado a los de otros dos periodistas, Guillermo León Agudelo y Alfredo Abad, de la misma emisora, asesinados entre noviembre y diciembre del 2000. La familia Turbay, propietaria de la estación, afiliada a la cadena Caracol Radio, había sido declarada como objetivo militar por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Dos días antes, el miércoles 4 de julio, fue asesinado Arquímides Arias Henao, en Fresno, al norte del departamento de Tolima, ubicado en la zona central del país. El periodista, de 39 años de edad, era director de la emisora local Fresno FM Estéreo, donde se encontraba cuando un desconocido ingresó a las instalaciones y le disparó en tres ocasiones. Arias Henao, pionero de la radio en ese departamento colombiano, cubría principalmente temas comunitarios y culturales.

El miércoles anterior, el 27 de junio, fue asesinado Pablo Emilio Parra Castañeda, de 50 años de edad, quien se desempeñaba como gerente y reportero de la emisora radial Planadas Cultural Estéreo y era presidente de la Unidad Operativa Municipal de la Cruz Roja del municipio de Planadas, al sur de Tolima. Su cadáver con dos disparos en la cabeza, fue hallado en una calle local.

De acuerdo a versiones oficiales, Parra Castañeda, conocida figura en el municipio, periodista dedicado y con basta experiencia radial a cuyo sepelio asistieron más de tres mil personas, habría sido asesinado por miembros de la guerrilla de las FARC por considerarlo un colaborador de los grupos paramilitares que también operan en la zona.

El presidente de la SIP, Danilo Arbilla, del semanario uruguayo Búsqueda, lamentó los asesinatos de los que llamó "forjadores del periodismo radial colombiano" y agregó que "en Colombia los bandos en pugna son los que están dictando la pauta de la libertad de expresión y de la libertad de prensa y arrebatan a los ciudadanos el derecho a estar informados".

"Es urgente que el gobierno tome cartas en el asunto para detener y contrarrestar las negativas estadísticas de violencia física contra los periodistas en este país. El respeto a la vida de los periodistas colombianos pasa por su peor etapa y es imperativo que antes estas contingencias se dispongan las medidas necesarias para garantizar la seguridad física de los periodistas", subrayo.

Por su parte, Rafael Molina, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, de la revista dominicana Ahora, se sumó a la petición de Arbilla y añadió que "en este país existe una nefasta cadena de violencia contra los periodistas y la prensa que en muchos casos promueve la autocensura y a los que deciden asumir los riesgos les acarrea la pérdida de la vida".

"Es necesario culminar en Colombia con las agresiones, el exilio forzoso, las amenazas de muerte, la quema de ejemplares de diarios, la destrucción de las instalaciones de los medios de comunicación y el asesinato de periodistas", destacó Molina

La SIP ha registrado en Colombia la cifra más alta de crímenes contra periodistas en el hemisferio occidental. Desde 1988 a la fecha han sido asesinados 99 comunicadores. Otros periodistas colombianos asesinados en los últimos 9 meses son: Yesid Marulanda Romero, Flavio Bedoya Tovar, Alfredo Abad López, Guillermo León Agudelo y Gustavo Rafael Ruiz Cantillo. La Unidad de Respuesta Rápida de la organización investigará en Colombia los crímenes de Vásquez, Arias Henao y Parra Castañeda.