La Sociedad Interamericana de Prensa reclamó a las autoridades colombianas una exhaustiva investigación por el asesinato de un periodista colombiano propietario de un periódico semanario, empresa que ya había sido afectada por la violencia en años pasados.

El periodista Alvaro Alonso Escobar, propietario del semanario Región, que circula en la población de Fundación, departamento de Magdalena, fue asesinado el 23 de diciembre en su casa tras recibir tres tiros en la cabeza. El agresor se presentó en su casa a las 7:00 de la tarde y tras una discusión le asestó tres tiros en la cabeza, para después escaparse en motocicleta.

Escobar cubría periodísticamente los municipios de Fundación, Aracataca, El Retén, San Angel y Pivijai, poblaciones consideradas de alto riesgo público por las autoridades debido a la marcada presencia de miembros de grupos guerrilleros y paramilitares.

El presidente de la SIP, Robert Cox, subdirector del The Post and Courier de Charleston, Carolina del Sur, pidió a las autoridades colombianas "una exhaustiva investigación para que se castigue a los reponsables con todo el peso de la ley y se establezcan los reales motivos de este crimen".

Según información de la Unidad de Respuesta Rápida de la SIP en Colombia, el comandante de la Policía de Magdalena, Luis Mesa, habría adelantado que el asesinato de Escobar "sería por razones personales" y que no se sabía que el periodista haya recibido amenazas con anterioridad.

Por su parte, Rafael Molina, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, director de la revista Ahora, Santo Domingo, República Dominicana, indicó que "no nos interesan impresiones prematuras sobre los motivos del crimen, sino mas bien que haya una investigación seria y profunda especialmente porque el crimen se produjo en este semanario cuyos miembros ya han sufrido la violencia y en una zona donde ya han caído muchos periodistas por su labor profesional".

En el semanario Región de Escobar solía escribir los editoriales el periodista Hernando Rangel Moreno, asesinado el 11 de abril de 1999. El último asesinato de un periodista en el departamento del Magdalena fue el de Gustavo Ruiz Cantillo, el 15 de noviembre de 2000.