La Sociedad Interamericana de Prensa lamenta la muerte violenta de un periodista durante una manifestación en la Ciudad de Guatemala, suma su voz de congoja al duelo de "la familia periodística" y reclama para que el crimen no quede en la impunidad.

"Nos unimos en el dolor a los colegas guatemaltecos, a sus familiares y a todo su pueblo, ya que con el deceso de Roberto Martínez Castañeda se ha hecho un gran daño al derecho del público a recibir información y retrocedido en materia de libertad de prensa", dijo Rafael Molina, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP. "El periodismo está de duelo", agregó.

Martínez era reportero gráfico del diario Prensa Libre de la Ciudad de Guatemala y al momento de su muerte estaba cubriendo protestas callejeras relacionadas con la crisis del transporte público en esa capital. Un guardia de seguridad de una empresa privada disparó contra Martínez con una escopeta de calibre 12.

En el incidente tres personas resultaron muertas, Martínez y dos ciudadanos. Otros dos periodistas recibieron lesiones leves, Cristian Alejandro García, camarógrafo de Notisiete, y Julio Cruz, del diario Siglo XXI.

Por su parte, el director del diario Prensa Libre, Gonzalo Marroquín, en su calidad de vicepresidente regional de la Comisión de Libertad de Prensa de la SIP se mostró confiado en que "este crimen no quede en la impunidad y que los responsables sean llevados a juicio y castigados".