Luego de hablar con amigos y parientes de la víctima, los investigadores que indagan sobre la muerte del brasileño Paulo Roberto Cardoso Rodrigues reforzaron la tesis de que el periodista fue asesinado por el contenido de sus reportajes, informó el sitio Midiamax. Una de las personas que prestó declaración fue el reportero paraguayo Cándido Figueiredo, alertado por la policía brasileña sobre un plan para matarlo motivado por su cobertura del narcotráfico en la frontera.

La policía sospecha de una venganza de delicuentes que se sentían perjudicados por el trabajo de Paulo Rocaro, como era conocido el periodista, explicó Folha de S. Paulo. Rocaro fue asesinado a tiros el domingo 12 de febrero en Ponta Porã (estado brasileño de Mato Grosso do Sul), donde editaba el periódico Jornal da Praça y dirigía el sitio MercosulNews.com.

Según las investigaciones de la polícia, se trataba de un "periodista combativo" en las áreas "criminal y política". La Policía Nacional de Paraguay fue notificada para intentar dar con los responsables del crimen.

El miércoles 15 de febrero, la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA divulgó un comunicado en el que repudió el asesinato de Rocaro, añadió Folha de S. Paulo en otra nota.

En Pernambuco, en tanto, la policía concluyó la investigación por el asesinato del periodista Luciano Pedrosa y aprendió a los principales sospechosos del crimen cometido en abril de 2011, reportó el portal G1. Uno de los investigadores del caso confirmó que el homicidio del periodista radial fue motivado por las denuncias que éste realizaba en su programa policial sobre el accionar de narcotraficantes en la región.